Sin darnos cuenta muchas personas podríamos estar incurriendo delitos a diario cuando enviamos mensajes por WhatsApp. Pero, cuáles podrían ser esas prácticas ilegales:
- Crear grupos en WhatsApp sin previa autorización. Es necesario que se pida el consentimiento de las personas que integrarían el grupo, pues de esta forma se divulgan nombres, números de teléfono e imágenes que se convierten en información personal relevante.
- Crear grupos con personas que no se conozcan entre sí. Además de lo mencionado anteriormente, en este caso ni siquiera con la autorización de las personas se puede crear un grupo si este es muy grande. Para esto lo mejor es crear listas de difusión. Si su teléfono es Android deberá abrir su WhatsApp, y en los tres puntos ubicados en la parte superior derecha aparecerá nueva difusión. Si su teléfono es iPhone le aparecerá la opción en la parte superior izquierda cómo listas de difusión.
- Enviar audios e imágenes de terceros sin su consentimiento. Esto podría atentar contra el derecho a la privacidad de la otra persona; esta es una de las prácticas más comunes. Las normas dicen que para estos casos se debe pedir autorización del dueño del contenido para replicarlo masivamente.
- Enviar pantallazos de conversaciones ajenas, si una persona involucrada en dicha conversación se diera cuenta podría perfectamente pedir una indemnización por la vulneración de su derecho a la privacidad.