Te prometo que no siempre te quedarás despierto por las noches llorando.
Te prometo que no siempre será lo primero en lo que pienses todas las mañanas.
Te prometo que no siempre sentirás que ese nudo en tu garganta es una roca imposible romper.
Te prometo que esas olas de dolor que te derriban se volverán más pequeñas.
Te prometo que caminar no siempre se sentirá como si estuvieras arrastrando las piernas.
Te prometo que compartirás un recuerdo sin sentir que te rompes por dentro.
Te prometo que no siempre estarás roto.
Te prometo que no siempre te dolerá, cómo te está pasando hoy.